Tras más de cuatro años cerrada, la icónica tienda Topshop de Londres ha vuelto a abrir sus puertas, aunque no bajo el nombre de la emblemática marca de moda – pese a los rumores de un posible regreso –, sino como una tienda IKEA.
IKEA se instala en una ubicación histórica
En el corazón del West End londinense, IKEA ha inaugurado su esperada tienda en Oxford Street después de una extensa renovación del edificio catalogado como Grade II ubicado en la intersección entre Oxford Street y Regent Street. Este establecimiento representa la segunda tienda urbana de IKEA en Londres y ha atraído a grandes multitudes interesadas en descubrir cómo la empresa sueca ha adaptado su oferta a un espacio mucho más reducido que sus conocidos grandes centros fuera de la ciudad.
La tienda abarca tres plantas dentro de un edificio de siete pisos y 239,000 pies cuadrados, cuenta con oficinas en los niveles superiores y comparte el espacio con otros inquilinos comerciales como Nike, que renovará su emblemática tienda Nike Town, un local temporal en el edificio vecino de Microsoft, y una tienda de cosméticos Space NK.
Una experiencia IKEA en el centro de la ciudad
A pesar del tamaño compacto en comparación con las ubicaciones suburbanas, la experiencia en esta tienda urbana es bastante familiar para los clientes fieles: presenta la organización típica en áreas de habitaciones decoradas, una sección de mercado y un deli que ofrece las famosas albóndigas suecas así como otros clásicos de IKEA.
El histórico edificio, que estuvo en manos de Topshop desde 1992 y disfrutó de gran popularidad entre los jóvenes, fue adquirido por IKEA poco después del cierre de la tienda en enero de 2021. La operación de compra, valorada en más de 500 millones de dólares, supuso un proyecto de renovación complejo que tomó cerca de cuatro años, probablemente debido a las condiciones iniciales del inmueble. La superficie destinada a la tienda es de aproximadamente 62,400 pies cuadrados, similar a la otra tienda urbana de IKEA en Hammersmith, oeste de Londres, que forma parte de un centro comercial transformado en el Livat Centre por Ingka Centers, la división inmobiliaria del grupo.
La estructura interna divide la oferta en un piso superior con productos seleccionados, mientras que los dos sótanos albergan las áreas de muestra tradicionales, servicios de diseño y el comedor con capacidad para 130 personas, que también ofrece opciones para llevar.
En la planta principal, el merchandising se presenta con un diseño cuidado y bajo para mostrar los productos de forma elegante, acorde a la alta renta del lugar, aunque es posible que esta disposición cambie con el tiempo. Los pisos inferiores ofrecen una experiencia más estándar, con una operación eficiente y atractiva para los seguidores de la marca.
Innovaciones y compromiso con el crecimiento
Además de la compra tradicional, la tienda incluye un Live Studio para eventos y transmisiones, una sección "Re-Shop" y "Re-Use" dedicada a productos IKEA de segunda mano o descatalogados, y un servicio de entregas para mayor comodidad.
Este nuevo punto de venta eleva la red de IKEA en el Reino Unido a 21 tiendas completas, dos urbanas, un punto de pedido y recogida, y tres lugares para planificar y pedir productos. La empresa ha reafirmado su intención de expandirse con aperturas adicionales en ciudades como Brighton, Norwich, Chester y Harlow.
En paralelo, Oxford Street, una zona que sufrió durante la pandemia con la salida de numerosos comercios, ahora está registrando un regreso notable de marcas importantes. Según expertos en bienes raíces de Savills, la tasa de vacantes podría estar bajando a menos del 1% gracias a la llegada de tiendas como Abercrombie & Fitch, New Balance, Mango, Uniqlo, y otras, consolidando el área comercial.
Por ahora, el gran protagonista es IKEA y su apuesta por una tienda urbana de alto perfil, la más destacada de su tipo a nivel global, en un emplazamiento emblemático de Londres, Reino Unido. Para quienes visiten, la pregunta es: ¿una albóndiga y un armario?